El chaleco es la prenda ideal para llevar el material de pesca bien clasificado. Vamos a ser modernos en este aspecto y olvidarnos de bolsas de plástico, bolsas con cremallera, bolsas de costado, etc. en las que el material va más o menos amontonado.
En los diferentes bolsos de un chaleco podremos distribuir todo el material de pesca, basándonos en que la distribución del mismo sea cómoda y lógica para el uso del mismo y si lo hacemos bien, sólo nos queda memorizar donde está cada cosa. Vamos a exponer un ejemplo de distribución del material en el chaleco tipo del gráfico.
> En los bolsos 1 y 2 de la parte superior, llevaremos siempre las bobinas que utilizamos para los bajos de línea, ya que de guardarlos en los bolsos inferiores, es muy posible que se rompan o fisuren al recostarnos sobre alguna roca, lo que suele traducirse en un enorme lío del hilo y pérdida del mismo. En la zona superior siempre estarán más protegidos. Si los bolsos mencionados son de cremallera en vez de velcro, mucho mejor.
> En el bolso 3 podríamos ubicar las barras o gusanos de luz que utilizamos para la pesca nocturna.
> El bolso 4 podría alojar las pilas y bombillas de repuesto de las linternas más usadas habitualmente. Las bombillas las meteríamos en una pequeño frasco o caja con tapa roscada.
> El bolso 5 llevaría los plomillos o perdigones de diferentes diámetros que se colocan en los bajos de línea. Los plomillos o perdigones estarían sueltos dentro del bolso, ya que con ello elegiríamos los más adecuados, según el estado de la mar, de manera rápida, cosa que no sucedería si los llevásemos en caja o bote con tapa a rosca y cuando los peces pican hay que andar rápidos y no perder tiempo. En el mismo bolso, llevaríamos una caja - a ser posible con compartimentos - con los anzuelos de diferentes clases y tamaños. Al tener los plomillos y los anzuelos en el mismo bolso, haremos los bajos más rápidamente. Este bolso deberá llevar cierre de cremallera obviamente, para evitar la pérdida de los plomillos. A este bolso se le puede incorporar una navaja.
> El bolso 6 serviría para llevar boyas de diferente tamaño completas con sus palos de fijación o barritas de plomo cónicas o troncocónicas (dependiendo de que la boya venga con lastre incorporado o no) y alguno más de repuesto. Es preferible que este bolso tenga cierre de cremallera.
> El bolso 7 valdría para llevar anillas de repuesto para la puntera de la caña de diferentes diámetros.
> El bolso 8 para llevar una barrita de silicona para las anillas.
> El bolso 9 para un rollo de cinta aislante.
> El bolso 10 para un rollo de hilo elástico para fijar al anzuelo carnadas blandas y un bote pequeño de pegamento rápido que nos sacará de más de un apuro.
Los chalecos suelen llevar además otros bolsos en su interior o en la zona trasera, en uno de los cuales se puede llevar un chubasquero. Hemos visto un caso hipotético de chaleco y la distribución del material, pero cada pescador tendrá que analizar el material que va a llevar y comprar el chaleco que se adapte a sus necesidades.
En el gráfico bajo el chaleco se puede observar el detalle de un bolso al que en el inicio y final de la cremallera, se le ha dado un cosido de hilo grueso (el dracon va muy bien) a fin de evitar de que el tirador se nos salga de la cremallera y se atasque, lo que conllevaría a tener que cambiarla entera.
Para los más previsores, decir que también hay chalecos salvavidas, para una posible caída al agua. En este caso el precio se dispara un poco. Un chaleco normal con bolsillos bien dispuestos para la distribución del material, puede tener un precio que oscile entre los 30 y 60 €.
Siempre que compremos un chaleco, deberá ser de color oscuro.En el mercado existen también las riñoneras, pero tiene mucha menos capacidad y deberemos tener en cuenta que en sus compartimentos, hay bobinas de monofilamento que no suelen entrar en los mismos.
La información facilitada tiene como fuente de referencia el libro de Ramontxu "La pesca con caña a corcho en la costa cantábrica" y que se puede adquirir a través de e-mail en salgai@salgai.net o llamando al 946 363 942 y os recordamos que es un libro único en su género, por sus características.
5 comentarios:
LOs puntos 4, 7, 8, 9, y 19 como que a mí no me hacen falta...o mejor dicho: como siempre me olvido de todo, luego soy tan tarugo que voy y rompo la puntera de la caña...y a mirar el mar...¡JObar, esto me tiene pasao , por eso siempre llevaba dos cañas! si es que no me da pa más...eso sí, boyas llevo mogollón, que se me salen por os bolsos.
En serio, está muy bien, y no sé porqué soy patidario de la cajita, que luego llueve o viene una ola y...pero el chaleco el problema es que pongo hoy el chaleco. El próximo día no lo pongo por lo que sea y se me olvida la mitad de las cosas en tierra...pero a estas alturas ya no aprenderé...
Q contentos están contigo los de las tiendas de boyas! ja,ja! Menos mal q el Arango de vez en cuando se estira. Para nosotros el chaleco es = de imprescindible que la caña. Anda q nos hemos quedado cortos, pues el chaleco parece a veces una ferretería, eso si todo vale, verdad Ramontxu? Y el maletero del coche ya ni te digo!
Amigo Carlos: El chaleco es una maravilla, pero cuando se va a pescar a corcho. si vas a corcho y a la vez a cacear, a llampares, a barbadas, etc., es mejor llevar un Land Rover o dos porteadores.
Ya empieza el "tocahuevos" con las boyas y mi chaleco ferretero...
Joder! Como estás esta mañana! Si chaleco ferretero también es el mio con la diferencia de q también llevo unos metros de cordel para descolgar las cestas en algunos pesqueros. Pues si que hubo guasa con las boyas y veo q aun colea.
Si es que no pue ser, es que me hacéis el día mucho más llevadero.
Agur, lagun y lagun...
MAñana si saco algún "cabezón" de esos con pijama a rayas, me acordaré de vos.
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