DE PASEO POR ONDARROA

El domingo día 7 de septiembre, tras la estancia de Ramontxu por Galicia, quedamos en Muskiz a las 5,45 h, los 3 mosqueteros, es decir, Ramontxu, Miguel y yo. En principio nos fuimos hasta el faro de Santa Catalina de Lekeitio, donde había una mar de fondo muy fuerte, por lo que nos dirigimos por la carretera de la costa hacia Ondarroa y pudimos comprobar que la pesca era impracticable en todo el trayecto, por lo que decidimos irnos al paseo que une Ondarroa con Saturrarán.

Vista hacia Ondarroa y la playa de Arrigorri.

Vista hacia la playa de Saturrarán y la punta que da paso hacia Siete Playas.

Cuando llegamos había dos pescadores lanzando a fondo y tras echar una ojeada a la zona, nos pusimos manos a la obra. Como se aprecia en las fotografías, es una zona intermareal y aunque la marea era a las 9,49 h, no tenía mucha intensidad ya que era de 11 pies (coeficiente entre 55 y 62), la verdad es que era la única opción para pescar algún pez.

Allí estaban Gorka y Miguel.

Es un lugar cómodo pero al ser paseo, tiene el inconveniente de ser muy frecuentado, por lo que hay que tener cuidado con no anzuelar a algún transeúnte al lanzar y "aguantar" las preguntas de los curiosillos, pero en fin, sin problemas y muy a gusto. Al final llegaron varios pescadores que respetaron las distancias prudenciales a nuestras cañas, lo cual es de agradecer hoy en día.

La mar en el roquedo, a pesar de estar al abrigo del espigón del puerto de Ondarroa, tenía golpes de mar de fondo alternado con largas calmas.

Llevamos una ración de quisquillas que había cogido Miguel el jueves y aunque estaban en su mayoría muertas, su estado era perfecto para el sargo, aunque también llevamos macizo de sardina fresca. Para encarnar usamos quisquilla, gamba arrocera, cangrejillo o momorro y tira de jibión. La profundidad de pesca varió entre los 1,5 y 3 m, con bajos del 0,225 y 0,205, un plomillo en el bajo de 4-5 mm, boya estilizada y bien lastrada, con la línea lastrada con 3 plomillos de 6 mm de diámetro, aunque pescamos casi todo el rato con ellos pegados a la boya, pues había quedadas relativamente largas.

El color del agua no era malo, aunque clareaban las piedras. Tiene multitud de txokos para probar junto a la piedra aunque también pican en ocasiones bien fuera. Estas son algunas de las zonas dónde pescamos.

Vistas en detalle del color del agua y de los caños y pozos que se generan con la marea entre las formaciones rocosas.

Tenemos la duda de que si habríamos llevado la quisquilla viva, podríamos haber pescado algunas lubinetas ya que, las rocas que hay junto a la playa es una buena zona para ellas, en las que se forma una corriente hacia el centro del arenal. Aquí Miguel mirando las lubinas que andaban por la playa.

A las 12,15 h dejamos de pescar y como podéis ver, cogimos unos sargos con destino a la degustación de pescado que tendrá lugar el próximo día 4 de octubre con motivo de la II Feria de Caza y Pesca de Muskiz. La foto fue sacada en un banco del paseo, colocando dos sacos para no mancharlo y es que cuesta poco ser curiosos. Fue un recorrido de unos 180 km, aunque comparados con los que hacen Sargoloco, Toño, Sito y compañía, no es nada. Bueno amig@s, hasta la próxima semana. ¡Agur!